
“El túnel terminará con esperas largas por la barrera baja, además de evitar accidentes y aportar calidad de vida. Esto es seguridad para el peatón y el conductor”, resumió el intendente de San Isidro, Gustavo Posse.
El secretario de Obras Públicas, Bernardo Landívar, precisó que el túnel tendrá una altura de 2.80 metros, necesaria para que también circulen ambulancias de alta complejidad.
Personal del Municipio entregó folletería a los frentistas, explicando los beneficios de la obra y los desvíos de tránsito.

La obra contempla la construcción de una estación de bombeo pluvial, sumideros y ramal para desaguar. Además, habrá iluminación del cruce y su área de influencia; señalización horizontal con pintura termoplástica; señalización vertical y reconstrucción de las veredas afectadas por las obras.
Características del nuevo túnel:
Será apto para tránsito liviano con una altura máxima de 2,80 metros. La curva vertical inferior tendrá un radio de 145 metros y una longitud de 28,90 metros.

Todas las veredas tienen el ancho suficiente para el ingreso y egreso de los automovilistas a sus respectivos garajes.
Estas veredas se ejecutarán con pavimento de hormigón con colores que diferencien las zonas de circulación peatonal de la vehicular.
Asimismo, se preverán en todo el cruce las bajadas en bocacalles para discapacitados y rodados de bebés.
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