
Luchas con espadas, hachas y armaduras, música de la época, platos típicos y mucha gente vestida para la ocasión, fueron algunos de los condimentos que hicieron de este evento gratuito algo único.
El intendente Gustavo Posse aprovechó la tarde para disfrutar de la iniciativa junto a su hija, Macarena. “Este deporte atrae a un montón de público por su particularidad, y nos encanta poder ayudar a fomentarlo y brindar espacios para organizar competiciones como ésta”, afirmó Posse.

“Los enfrentamientos son intensos pero muy seguros porque las armas no tienen filo ni punta. Se respetan muchas normas y los participantes siempre están cuidados”, destacó.
Participaron del torneo 40 luchadoras, en representación de clubes de Capital Federal y Gran Buenos Aires, y las ganadoras obtuvieron una plaza en una competición internacional a desarrollarse próximamente.
Mientras sorprendido miraba una de las luchas, con su hijo en hombros, Diego Peña, de Villa Ballester, aseguró: “Me parece una movida bárbara y es fantástico lo bien que está recreado todo”.
“Me gusta la onda histórica así que desde hace un tiempo sigo la lucha medieval. Me parece bien que se haga esto para que siga ganando adeptos”, remarcó Tomás Savage, de San Isidro.

La iniciativa fue organizada por la Federación Argentina de Combate Medieval y el Grupo Scout Santa Teresa, y contó con el apoyo del Municipio.
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